El programa de iluminación que impulsa la Alcaldía de San Salvador Este, ha generado un impacto significativo en diversos lugares al instalar luminarias en zonas que antes carecían de iluminación adecuada.
Este proyecto no solo ha mejorado la visibilidad en calles y espacios públicos, sino que también ha contribuido a fortalecer la seguridad ciudadana. Con una mayor iluminación, los habitantes pueden transitar con más confianza durante la noche, reduciendo los índices de delincuencia y creando un ambiente más seguro para todos.
En esta ocasión el programa ha llegado a Montes de San Bartolo IV en el Distrito Soyapango, lugar en el cual, se necesitaban este tipo de intervenciones, que por años parecía olvidado.
Cabe destacar que las calles bien iluminadas también fomentan la actividad comercial nocturna, permitiendo que pequeños negocios y vendedores informales extiendan sus horarios de atención. Esto no solo dinamiza la economía local, sino que también genera oportunidades de empleo y mejora la calidad de vida de las familias que dependen de estos ingresos.
Los trabajos municipales también consistieron en la reparación de lámparas que no funcionaban en el sector, en este sentido, la visión municipal del jefe edilicio se cumple al pie de la letra en la encomienda de llevar mejores servicios y calidad de vida a los habitantes.
Ante esto, la ciudadanía aprueba las acciones municipales y agradecen los trabajos realizados, “Gracias a la intervención del alcalde ahora ya tenemos colonias más iluminadas, pedimos que revisaran las lámparas y los equipos de la alcaldía ya se encuentran aquí, por eso agradecemos.” Mencionaron los habitantes beneficiados.
Desde el punto de vista ambiental, “Luces de Esperanza” ha incorporado tecnologías eficientes y sostenibles en sus luminarias, como el uso de energía LED. Estas luces consumen menos electricidad y tienen una vida útil más larga, lo que reduce el gasto energético y contribuye a la conservación del medio ambiente.
Este programa se ha convertido en un ejemplo de cómo la inversión en infraestructura básica puede mejorar significativamente la calidad de vida de los ciudadanos y sentar las bases para un futuro más próspero y seguro.